Ya estamos inmersos en el crudo invierno y, en consecuencia, nunca está demás tomar precauciones y evitar con ello la posibilidad de contratiempos y como no situaciones difíciles que se nos puedan presentar.
En la revista “GRANDES ESPACIOS-Turismo Activo”, nº 205-Diciembre 2014, editada por DESNIVEL, se publica el artículo escrito por José Eladio Sánchez, Director de la Escuela Madrileña de Alta Montaña, que titula “Los diez mandamientos del montañero invernal”, el cual transcribimos, en forma resumida, a continuación:
“PREVÉ EL TIEMPO QUE VA A HACER. Siempre es necesario conocer la predicción meteorológica cuando se sale a la montaña, pero en invierno es imprescindible. Si en verano te sorprende una tormenta lo normal es que termines hecho una sopa. En invierno un cambio brusco puede resultar dramático. Existen diversas páginas web de gran credibilidad para poder informarnos…
LA NIEVE ES BONITA PERO PELIGROSA. La nieve es un elemento en constante transformación que pasa por fases de mayor o menor estabilidad, y esto afecta a nuestra seguridad, incluso en montañas de baja altitud. La primera medida de seguridad es consultar los boletines de aludes. Con nivel 3 o mayor de 3 en la zona que tenemos previsto ir, es mejor buscar otro objetivo…
VISTETE COMO CORRESPONDE. Parece una perogrullada decir que hay que vestirse “correctamente” para enfrentarse al frio, pero es que sigue siendo habitual ver en la montaña a personas mal vestidas que se exponen a una hipotermia o, como mínimo a un resfriado…
EL MATERIAL DURO. El piolet y los crampones son las herramientas básicas en invierno para todos los deportistas de montaña, ya sean montañeros, alpinistas y esquiadores…
CUIDADO CON DESPISTARSE. Si en verano es necesario llegar los elementales instrumentos de orientación (mapa, brújula, altímetro), figuraros en invierno. No hay situación que nos haga sentirnos más desorientados y desamparados que encontrarnos inmersos en la niebla o en una ventisca en medio de un paisaje nevado sin puntos de referencia… En estas circunstancias el GPS es de gran ayuda…
PRIMEROS AUXILIOS. Se ha dicho todo de la necesidad de incluir un botiquín en nuestra mochila… En realidad un botiquín de invierno difiere poco del de verano, salvo quizá en tres elementos: bolsas de calor (producen un calor intenso por una reacción química), manta de supervivencia… y un mechero cargado. Lo óptimo sería tener noción de primeros auxilios…
COMER PARA CALENTARSE. En invierno es aún más importante alimentarse bien durante la actividad, pues debido al frio nuestro cuerpo necesitará más calorías. Pero alimentarse mejor no significa comer más… Lo mejor es comer cada dos horas frutas secas (FRUTAS, no frutos), como hijos, orejones, dátiles…Beber abundantemente… Es buena idea llevar un termo con té o caldo caliente, o llevar zumo, además de la cantimplora con al menos 1 l. de agua…
LA ELECTRONICA TAMBIEN COME. Los aparatos eléctricos y electrónicos (teléfonos móviles, walkie-talkie, GPS, ARVA, y linterna frontal) no faltan en el moderno equipo del montañero. Todos son muy útiles y algunos imprescindibles, pero tienen un talón de Aquiles: que las baterías en invierno se descargan muy deprisa. Por eso antes de salir de casa es obligatorio comprobar que todos los aparatos que llevemos tienen las baterías bien cargadas. Y en segundo lugar hay que protegerlos bien del frío y de la humedad…
EL SOL DE INVIERNO TAMBIEN QUEMA. La nieve refleja la luz y los rayos ultravioletas aumentando de forma notable la radiación que recibimos… Por lo tanto hay que proteger con cremas solares de alto factor de protección la piel que no esté cubierta por la ropa… Los ojos también son muy vulnerables y no vale con cualquier gafa de sol. Hay que utilizar las de categoría 4, o, como mínimo, 3…
EL COCHE QUE TE LLEVA Y TE TRAE. La aventura de una excursión invernal comienza al salir de casa. La mayoría de nosotros llega a la montaña en coche y esto significa que también el automóvil debe estar preparado para el inverno. Hasta la Dirección General de Tráfico hace campañas de publicidad sobre ello. No olvides meter en el coche unas “buenas” cadenas (y saber ponerlas), llevar en el radiador líquido anticongelante y unas pinzas para la batería.” Esperamos que todo lo anterior en la medida de lo posible lo tengamos en cuenta cara al invierno que ya tenemos a la puerta de casa. ".
Norberto Nosti Movellán
Grupo de Montaña Monsacro